Fuimos mucho más que nada, fuimos la mentira, fuimos lo peor. Fuimos los
soldados a la madrugada por esa ambición. Y ahora estoy en libertad, y ahora
que puedo pensar, en no volver a ser esa
misma de antes. Y que tristeza hay en la ciudad, amor, sábado soleado. Y en
el centro de la estatua del dolor me sentí parado. Fuimos mucho más que todos, reyes
de la noche, de ésta tempestad. Si te vendí, si te robé, te traicioné, fue por
uno más. Y querer lo que querés, sin tener que lastimar, recordando que tu
amor, se robó mi dignidad, olvidémonos
los dos,
no volvamos a empezar...
¿para qué?